Ingredientes
Para el relleno
½ kg. de
espinacas
3 huevos
150 gr. de queso
semigraso
½ cucharadita de
cominos molidos
Pan rallado
Sal
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Para el empanado y fritura
Harina
Huevo
Leche
Pan rallado
Aceite de oliva
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Elaboración
Del
relleno
- Lava y pica las espinacas en trozos grandes.
- Ponlas en una olla, añade sal y un vaso de agua.
- Tápalas y déjalas cocer cinco min. a fuego suave.
- Destapa y escurre.
- Pásalas a un bol, añade los huevos y mezcla.
- Ralla encima el queso y espolvorea con el comino.
- Mezcla todo bien.
- Incorpora un poco de pan, solo el necesario para poder trabajar la masa (2-4 cucharadas).
- Déjala enfriar en la nevera.
De
las delicias
- Forma bolas del tamaño de una nuez y después aplánalas ligeramente.
- Pásalas primero por harina, después por huevo batido con leche y por último por pan rallado.
- Fríelas en abundante aceite bien caliente.
- Escurre sobre papel absorbente.
- Lo primero es el tratamiento del producto: debes procurar que esté lo más seco o mejor escurrido posible, pues de lo contrario, el aceite se llenará de agua que además de salpicar, puede formar mucha espuma y hacer que rebose y se deteriore su calidad.
- En caso de empanado, el pan debe estar seco y bien adherido. Para conseguirlo, una vez hayas terminado de empanar rocía con una buena cantidad de pan rallado extra, cuando vayas a freír, ve sacudiendo los alimentos para quitarle el sobrante.
- La temperatura debe ser alta, pero sin dejar que se queme para no estropearlo. Justo cuando va a comenzar a humear. Aunque también depende del alimento.
- Si ves que la temperatura se ha bajado, espera a que remonte antes de añadir la siguiente tanda. Si es demasiado alta y los alimentos se doran muy rápidamente sin tiempo para cocinarse por dentro, bájala un poco. La ruede de la freidora puede moverse, no es de adorno.
- No debes incorporar demasiada cantidad de producto de una vez para evitar que se baje la temperatura y los alimentos se impregnen de aceite.
- El dorado debe ser homogéneo: ni demasiado claro, que significa que está poco hecho y puede que el interior esté sin cocinar o que la corteza no resulte crujiente; ni demasiado oscuro, que puede provocar sabores amargos o un producto reseco por dentro.
- No olvides escurrir siempre sobre papel absorbente tus frituras. Fíjate en cómo queda el papel de empapado cuando retiras el alimento. Todo eso irá a parar a tu organismo si no lo evitas.
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