4 manzanas reineta
100 gr. de azúcar
100 ml. de zumo de
naranja
1 palo de canela
La cáscara de un limón y
de una naranja
100 gr. de frutos secos
variados (uvas, pasas, avellanas, nueces, cacahuetes, etc.)
Unas hojas de hierbabuena
Cuando
queremos representar la salud siempre nos viene a la cabeza una manzana, y para
reforzar esta imagen, está aquel viejo refrán de “a diario, una manzana es cosa
sana”. Y es que las manzanas poseen
extraordinarias propiedades para nuestra salud: son depurativas, por lo que
ayudan a nuestro organismo a eliminar toxinas, contribuyen a disminuir el
colesterol malo y a evitar el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares,
nos ayudan a combatir el estreñimiento y la diarrea y son estupendas para los
diabéticos. Aportan fibra y agua y muy pocas calorías. Tienen además un efecto
sedante, por lo que resultan muy adecuadas para tomarlas antes de dormir. Son
bien toleradas por la mayoría de las personas y combinan muy bien con otros
alimentos, lo que las convierte en un excelente ingrediente en la cocina.
Elaboración
- Vierte en una cazuela zumo de naranja con el azúcar, la canela, y las cáscaras. Ponlo a calentar.
- Pela las manzanas y retírales el corazón.
- Coloca una vaporera sobre la cazuela y, dentro de ésta, las manzanas. Pon la tapadera y cocina hasta que las manzanas queden bien blanditas (entre 15-20 min.).
- Retira las manzanas con cuidado.
- Vierte la mitad del almíbar que se ha formado en la cazuela sobre los frutos secos. Mezcla bien y rellena con ellos las manzanas.
- Rocíalas con un poco de azúcar y quémalas con un soplete o con una pala de quemar.
- Decora con unas hojas de hierbabuena y con el resto del almíbar.

¿Qué decir de
las naranjas? Que son un alimento
antioxidante, cardioprotector, laxante, diurético, desinfectante, estimulante
del sistema inmune y antitumoral, entre otras propiedades. Una de las frutas
más populares y consumidas en el mundo por su extraordinaria composición
nutricional y su demostrada capacidad para ayudar a prevenir múltiples
dolencias. Al igual que las manzanas sirven para elaborar o enriquecer multitud
de platos por lo que se convierten en un ingrediente habitual en nuestras
cocinas.
Los frutos secos son
alimentos concentrados energéticamente, pero muy nutritivos, colmados de
nutrientes beneficiosos para el organismo: su contenido en grasas saludables,
su importante diversidad de vitaminas y minerales entre los que destacan
el potasio, magnesio, fósforo y, en algunos, calcio, vitamina E y del
complejo B.
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